En la casa de Gran Hermano, Valentina emprendió una conversación franca con su hermano, Marcos, expresando su inquietud por su estado desde su entrada en el reality.
“Te veo con una energía muy, muy baja. Quiero animarte un poco, pero me siento limitada”, confesó la profesora radicada en Francia a su hermano, a quien no había visto en más de un año.
Marcos compartió con Valentina que su llegada había desencadenado emociones encontradas. “Cuando llegaste, sentí mucha alegría, pero también muchas ganas de ver a mamá y papá”, le confió.
Valen instó a su hermano a aprovechar al máximo el tiempo juntos en la casa. “Deseo que te muestres un poco más abierto conmigo”, manifestó la joven.
“Estos días han sido agotadores. He estado durmiendo poco. Pero creo que si puedo descansar mejor y alimentarme más, recuperaré energías”, sostuvo el Primo.
“Mi deseo es verte bien”, expresó Valen a Marcos, quien respondió que está tratando de mantener una actitud positiva y que, de hecho, su rostro cambió cuando la vio.
“Entiendo que estás feliz, pero siento que no estás en tu mejor estado. ¿Estás comiendo lo suficiente?”, indagó Valen. “No tanto ahora, la semana pasada fue peor”, respondió Marcos.
La profesora de español mencionó el cambio en el aspecto físico de su hermano, un campeón de artes marciales, notando su pérdida de peso. Marcos confirmó que ha perdido varios kilos desde el comienzo de Gran Hermano.
“Por eso, procura descansar más y si te sientes así, evita ayunar. Si estás entrenando mucho, necesitas reponer esas calorías. Además, la falta de sueño puede ser debido a muchas preocupaciones”, aconsejó Valentina al “Primo”.