La calma reinaba en la cocina de Gran Hermano mientras Julieta y Camila aprendían a preparar ñoquis bajo la tutela de Romina. Sin embargo, el silencio se vio interrumpido por la inquietud de la exdiputada Romina, quien se preguntaba dónde se habían metido los cachorros.
Intrigada, Romina partió en busca de los perritos y los encontró en el cuarto de las chicas. Acompañada por Mora y Carmelo, llevaba consigo una cajita de maquillaje perteneciente a Julieta. La sorpresa surgió cuando Romina mostró el maquillaje dañado, lo que provocó una reacción de sorpresa y desesperación de Julieta al ver que los cachorros se habían “merendado” su cosmético.
La confusión llevó a una enérgica reacción por parte de Julieta, quien expresó su frustración y preocupación. Romina intentó tranquilizarla recordándole que el final del reality estaba cerca y que no debía preocuparse por el maquillaje.
Sin embargo, la anécdota tuvo un giro inesperado cuando Julieta, mientras lamentaba la situación, accidentalmente pisó a uno de los cachorros. Este episodio inusual añadió un toque humorístico y adorable a la situación, ilustrando cómo la convivencia en la casa de Gran Hermano puede estar llena de momentos inesperados y llenos de ternura.