A pesar de no tener grandes enemigos en la Casa, Mauricio se esperaba esta nominación y solo atinó a afirmar con la cabeza cuando Solita le dio la mala noticia. Sin embargo, en el Confesionario, advirtió que iba a haber cambios. “Lamentablemente voy a tener que empezar a jugar”, le dijo a Gran Hermano. Refiriéndose al público, el skater hizo un diagnóstico de su situación: “Yo sé que ahora soy un personaje de la TV, y si los de afuera dicen que mi personaje terminó, bueno, lo acepto”, admitió, aunque también puso énfasis en sus sueños de quedarse.