Hace días que Matías tiene algo más que decirles a sus compañeros. Y el tópico de la razón por la que entraron a la Casa fue el momento ideal. Después de hablar de otros temas, tomó envión y confesó: “Me siento con la frente alta para decirlo. Yo, además de todo, soy gay”. Ante el silencio respetuoso de los chicos, se animó a seguir: “Fue muy duro, porque después de lo que le pasó a mi familia, no tenía un viejo o una vieja para orientarme en este tema”, se lamentó. “Encima está la cuestión de las discriminación, que es muy jodido”, agregó.