Esta es una Casa llena de sorpresas. Y esta vez el encargado de asombrar a los chicos fue nada más y nada menos que Jorge Guinzburg. Jorge no vino sólo: lo acompañaron ocho pupitres similares a los que utiliza semana a semana en su programa El Legado, para que los chicos demostraran sus conocimientos junto a él. Y, también, propuso para el ganador un premio: una visita “muy especial” a la Sala de Intimidad y Misterio. Las bromas, como era de esperarse, se sucedieron: Jorge visitó el confesionario, y charló con Gran Hermano, paseó con Vivi por el jardín y visitó las piezas con Nati. El ganador del juego fue Eduardo. ¿Cuál será su SIM?