El día del Tucán

Durante el día los chicos recibieron visitas. Como en la primera edición de Gran Hermano, la Casa recibió a un nuevo integrante a pocas semanas del final. En aquella oportunidad el ingreso del robot Mateo divirtió y distendió a los chicos. Ahora, es el turno del tucán Alejo. Con un estilo irreverente, le hizo bromas a todos. “Como no tenés letritas abajo no te entiendo”, le dijo a Roberto. “¿Para qué querés comida si las eses ya te las comiste?”, le señaló a Ximena. Al Paisa le cuestionó su modo de hablar parecido al de Landriscina. “Es una costumbre”, se defendió Javier. “Sí, una costumbre de Landriscina”, replicó el tucán.

El tucán Alejo no entró a la Casa sólo para divertir a los participantes. Después de presentarse y charlar con ellos, les propuso un juego. Los chicos debieron contestar preguntas de interés general. El premio era una cena íntima con una persona del sexo opuesto. Roberto fue el ganador, y eligió a Silvina como acompañante. Después, el juego siguió, pero esta vez la competencia fue por una picada con cerveza. Ganó Gustavo y Ximena fue su elegida. En el camino quedó el Paisa, que confundió al griego Ulises con un caballero de las Cruzadas.