Al parecer Ximena es la más preocupada por las últimas nominaciones. Mucho más que Alejandra y Javier, sus compañeros de nominación, la Negra comenzó a buscar culpables e inocentes entre los habitantes de la Casa. Y comenzó con Roberto.
La Negra se enteró, por uno de sus compañeros, que según Roberto ella no tuvo rivales difíciles en las tres nominaciones que pasó. Y no encontró mejor idea que ir a contárselo al mismo Roberto. “Eso es cizaña”, estalló el Negro. “Me da bronca que la gente hable por mi”, agregó casi en llamas. Xime, ya convencida de que su comentario había llegado a destino, intentó bajar el tono. “Yo pensé que de mala leche no lo dijiste… ya está Negro, olvidate”, intentó calmarlo. “Quien te lo dijo duda de mi palabra, y eso me revienta las huevos”, disparó el Negro, preocupado en conocer el nombre de quien había hablado. “Yo no quiero influenciar a nadie”, concluyó Xime para dar por terminada la conversación que ella misma comenzó.
En el tópico de la noche del domingo, los participantes tuvieron que hablar sobre qué cosas les molestan de sus compañeros. Gustavo se tomó su tiempo y habló de casi todos. “Me molesta que seas tan fría. No viene al caso dar ejemplos, pero en la Casa pasaron cosas muy grossas, y a vos te resbaló”, le dijo en tono acusador a Alejandra. Según parece, el fierrero sigue disgustado con la cordobesa porque ella no tomó una actitud firme con Maximiliano, cuando buena parte del grupo lo acusó de poco sincero. Después, Gus habló de Ximena. “Te hacés problema por cosas que no te corresponden”, sostuvo. El final fue para Roberto. Según Gustavo, el maderero “explica demasiado” las cosas.