Magaly vs. Ximena

Después de haber sido nominada, Magaly estalló en llanto sin poder entender la causa por la que sus compañeros la habían votado. Entró al confesionario con la cara llena de lágrimas, pero enseguida se recompuso. “Soy neutral, muchas veces no opino para no ir al choque. ¿Hay que ser mala persona para que te quieran?”, dijo. Después, apuntó sus misiles a Ximena, su competidora esta semana. “Le pido a la gente que analice todo: desde los gestos hasta las actitudes de las dos personas nominadas. Que vean quién es transparente y quién no. Quién miente y quién no”, propuso.

Para la Negra no significa una sorpresa estar entre los nominados. Tal vez por eso entró tranquila al confesionario a explicar cómo se siente y porqué se quiere quedar en la Casa. “Me duele todo esto, porque tengo una relación excelente con la mayoría de los chicos, y por más que esto sea un juego, me siento mal”, admitió. “Determinadas personas quieren que me vaya; yo lo entiendo pero voy a pelear para quedarme”, anunció la Negra decidida y confiada en si misma.

La disputa entre Magaly y Ximena no se remite solamente a las nominaciones. Resulta que la Negra se acercó mucho a Gustavo durante la última semana. Y cuando Solita dio los nombres de los candidatos a abandonar la Casa, el fierrero estaba sentado al lado de Xime, a quien abrazó en más de una oportunidad. Maga miró varias veces hacia ese lado, y su gesto de disgusto fue elocuente.

Por la tarde, la que estalló fue Yazmín, que en el confesionario mostró su desconsuelo por la importancia que está cobrando Ximena en la Casa. La chica de Banfield, más cercana a Carolina, expulsada, y Magaly, otra vez nominada, siente que la Negra está manejando los hilos de la Casa, y ve que en ese nuevo orden, ella no tiene demasiada cabida.