Verdades y consecuencias

Finalmente, Gustavo comenzó el día hablando con Ximena después de dar varias vueltas sobre el tema. Es que él ya no resistía pensar mal sobre la Negra hasta que le soltó: “Yo me había hecho cargo de un mal gesto tuyo, que el negro me dijo que no había sido por mi…. Y me molestó porque yo pensé que eras frontal, y que no ibas a hacer eso…”

La Negra dio sus explicaciones: aseguró que nunca había hablado mal de Gustavo: “yo no pienso mal de vos, y eso que vos habías hablado mal de mí con Yazmín y Magaly”. “Yo si tengo un problema te lo digo-explicó Gus- Yo quiero hablar con vos porque no quiero estar mal con vos, eso me jode…”, remató él para luego no saber si había aclarado algo o no.

Luego del almuerzo, y como si estuvieran otra vez en la escuela, los chicos se prestaron al juego Verdad-Consecuencia. Las preguntas giraron en torno a las relaciones entre hombres y mujeres. Una semana a pura cultura “¿Tendrías sexo sin amor dentro de la casa?”, le preguntaron a Gustavo. “Hoy te digo que no, pero mañana no sé”, contestó ante la atenta mirada de Magaly. Entre tantas preguntas, Ximena confesó sentirse atraída por un integrante de la casa. Alejandra también aseguró haberse interesado por otro hombre antes que Pablo. Además, echó más leña al fuego cuando habló nariz con nariz con Gustavo para cumplir una prenda.

En el final de la tarde, los participantes trabajaban para la prueba de la semana en el jardín cuando vieron que por el suelo pasaba una cucaracha. “¡Qué asco, una cucaracha!”, gritó Gustavo mientras Ximena corría a tratar de agarrarla con la mano. “No, ¡con la mano no!”, repetía una y otra vez él mientras intentaba pegarle al insecto con un trozo de género. Cuando lo logró y el oscuro animal agonizaba ya bajo la mesa del patio, Gonzalo y Magaly se sumaron a la actividad. La rubia intentó terminar de dar muerte a la cucaracha con un cuchillo y se ganó así la acusación de ser la única autora del crimen.