Por la tarde, los chicos se acercaron mucho al triunfo que conseguirían más tarde. Una parada difícil fue recitar el poema en francés. Gran Hermano aclaró antes de comenzar que había que recitar el poema con entonación, y no leerlo de memoria. Primero pasó Silvina que, a pesar de alguna dificultad inicial, cumplió un papel aceptable. Después fue el turno de Gonzalo, que se puso muy nervioso e hizo tambalear la resolución de la prueba. Finalmente, Pablo hizo gala de su histrionismo y completaron el recitado con éxito.
Ya entrada la noche, los participantes superaron el desafío de la semana tras ganar la última etapa de la prueba. Cumplieron con la última parte: bailar un vals en el jardín vestidos de gala.
Yazmín, Carolina y Silvina bailaron con Gustavo, Roberto y Gonzalo hasta que Gran Hermano comunicó oficialmente que la prueba había sido superada con la aprobación de todas las instancias: dar una clase sobre el 25 de mayo de 1810; completar un examen de geografía; comportarse con corrección en la mesa y utilizar adecuadamente los cubiertos; aprender una poesía en francés y leerla con pronunciación perfecta; y reducir la cantidad de malas palabras. Así los chicos incrementaron su presupuesto en un 90 %.