Una época terrible

Tamara no la pasó nada bien durante la adolescencia. Frente a la rebeldía de la edad se refugió en la calle y la noche. Y las anécdotas de aquellos años van saliendo de a poco. Este jueves a la mañana, hablando de cicatrices, les habló a chicas de las noches en que volvía lastimada a la casa. “Usaba pantalones negros y no se veía la sangre. Después me curaba sola para que no me vean. Mis viejos nunca se enteraron”. Las otras la miraban atónitas. “Mirá si te toca una hija como Tamara”, bromeó Natalia. Pero la India, lejos de inhibirse, siguió recordando: “En ese momento no le tenía miedo a nada. Yo siempre tuve un Dios aparte”, contó con la confianza de haberlas vivido todas. Por si quedaba alguna duda, su conclusión fue terminante: “En esa época era terrible”.