Encuentro muy cercano

Gastón y Eleonora estuvieron cerca. Demasiado cerca. Es que como adelanto del cumpleaños de Martín, Gran Hermano le regaló a cada participante dos latas de cerveza. Y esa pequeña dosis de alcohol fue suficiente para que los chicos perdieran las inhibiciones. Hubo un Striptease general, y renació el acercamiento que hace algunos días habían tenido Gastón y Eleonora. Se alejaron del resto del grupo, y se sentaron uno sobre el otro en un rincón del parque. Pronto comenzó a subir el voltaje de la charla y de las caricias. Gastón propuso esconderse debajo de la mesa, para evitar la mirada atenta de Gran Hermano, pero Eleonora no salió de sus dudas y entre los dos quedó la promesa de intentarlo otro día.