“No hago lo que no me gusta que me hagan”. Con esa frase define María Fernanda Zapata su forma de actuar. Esta asistente social tiene 30 años, vive en General Pacheco, en la zona Norte del Gran Buenos Aires, y trabaja en una escuela de las Islas del Tigre, rodeada del verde y la naturaleza del río. No es difícil adivinar que le gustan los animales, y que su sueño es conocer las maravillas naturales del mundo, en Asia y África.
“Adoro a los animales, y amo especialmente a los perros”, anuncia Fernanda, y afirma que la única forma de ser feliz es “encontrar la paz en uno mismo, y `ser humanos´ en los dichos y en los hechos”.
“Mi vida siempre estuvo llena de sueños y de ilusiones. Algunos ya se cumplieron, y otros están por venir. Puse mucho esfuerzo en llegar a ser la profesional que hoy soy, y en tener mi casa. Dos cosas que pude lograr”, relata. Hacia delante, la espera otro sueño: “Formar una familia. Unirme a un buen compañero y escuchar que alguien me llame mamá”.
Otro de los sueños de Fernanda era llegar a tomar parte de Gran Hermano. “Me inscribí, me mostré tal como soy… ¡y acá estoy! Esto me demuestra que debemos soñar y ponernos metas en la vida. Todo, con un poco de esfuerzo y sacrificio, se puede lograr”.